Parece que me salgo un poco del tiesto con este post, pero no tanto. Primero dedicarle este post a unos compañeros de clase que han tenido que cursar una asignatura relacionada con el terrorismo y que se han hartado de hablar y leer sobre el 11-S. Vero, Eva y Alex, os lo dedico jejeje.
El 11-S es un acontecimiento que ha marcado el mundo. El cine también se ha visto afectado por este trágico suceso y a partir del 11/9/2001 han proliferado un buen número de películas y obras audiovisuales relacionadas con este acto terrorista (cuyo autor es una incógnita a día de hoy). Títulos como "World Trade Center", "United 93", la TV movie "Flight 93" o el documental de Michael Moore "Farenheit 9/11". Un gran impacto tuvo en "Spiderman", la primera película del hombre araña, dirigida por Sam Raimi y que se estrenaría en el 2002. Para su difusión se preparó, antes del ataque a las Torres Gemelas, el siguiente teaser.
Este teaser se retiró de las salas y se prohibió su exhibición ya que atentaba contra la memoria de los caídos.
Este teaser os lo muestro para relacionar el tema central de este blog con uno de los sucesos que más han conmocionado al mundo en la historia. Yo siempre he dudado de la autoría de este ataque. Aunque fuese complicado aceptarlo y digerirlo, siempre pensé que el gobierno de George W. Bush estaba detrás de todo.
Pues bien, mirando por internet encontré de rebote un video en el que se expresan los argumentos más firmes que he escuchado y que vinculan directamente a Bush con el atentado. En este fragmento, extraído del documental "Zeitgeist Movie", prácticamente se demuestra que la caída de las torres no fue a causa del impacto de los aviones, que fue todo provocado y que el ataque que mató a más de 3000 norteamericanos fue perpetrado por el propio gobierno de los Estados Unidos.
Os dejo aquí el fragmento y espero que os haga reflexionar. Las élites nos tienen por peleles y no podemos dejarles que jueguen con nosotros, y mucho menos con nuestras vidas.
1 comentario:
Siento diferir con tu idea de que el 11-S fue provocado por el mismísimo gobierno de los Estados Unidos, al igual que me negaría a creer que el 11-M fuese obra del gobierno de Aznar o de la oposición.
La autoría fue reclamada, en ambos casos, por Al-Qaeda. Este grupo lleva operando mucho antes de que Bush tomara el control norteamericano. Me resulta difícil de creer que el grupo terrorista fuese una organización "asalariada" de EEUU. Lo más parecido a colaboración de los americanos con los terroristas, fue cuando aprovisionaron de armas a los talibanes para acabar con la ocupación soviética de Afganistán.
Llevando esto al cine, creo que Michael Moore, por ejemplo, toma un criterio de realidad bastante parcial, e intenta construir un relato en Farenheit 9/11 que es claramente oportunista. Sin embargo, cuando se estudia un poco más sobre el tema, se comprenden ciertas actitudes tanto del gobierno Americano como del mismísimo Bush.
Respecto a la forma de abordar este escabroso tema en el cine, veo dos planteamientos bien definidos: el respeto máximo y el oportunismo. En mi opinión, la mayoría tienden al oportunismo, porque (siguiendo con el ejemplo del bueno de Moore) toman tan sólo porciones de la realidad. Es imposible conocer el 11-S si se toma como impactos de aviones sobre edificios.
No, el 11-S es mucho más. Hay muchas cosas antes, durante y después de los impactos. El silbar de los aviones llevaba escuchándose desdes hace mucho tiempo. El problema es que nadie oía ese silbido y, sobre todo, que nadie escucha ese silbido ahora.
Porque ese sonido inquietante y amenazador... sigue ahí.
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